EXTRAÑO WEYS. “EL REGRESO DE LOS CLÁSICOS”

EXTRAÑO WEYS. “EL REGRESO DE LOS CLÁSICOS”

Rodrigo Laviña es un veterano del hip hop catalán con gran recorrido en la escena, ha formado parte de grupos como Pirat’s Sound Sistema y At Versaris. Después de siete años de silencio presenta nuevo disco bajo el paraguas colectivo Extraño Weys que comparte con Patxi Vazili aka V.Pizza y el miembro satélite El Gordo del Puru.  Acaban de publicar Rodrigo Laviña y su combo (Say It Loud Records, 2021), un disco totalmente recomendado, trabajado al milímetro, que viaja a través del vinilo, los samples y las cajas de ritmos.

Texto por MC Alberto  •  Fotos por cortesía de Say It Loud

“Nuestro proyecto está vinculado al amor que sentimos por esto más allá de las exigencias del mercado y el fast food generado para un público adiestrado a engullir acríticamente cualquier producto respaldado por el dinero.”

“Hay que poner de tu parte para que salgan las cosas e intentar no dejar mil cadáveres por el camino.”

ALZANDO LA VOZ

EL RITMO DE LA CALLE: Hola Rodrigo, encantado de poder entrevistarte. Han pasado 7 años desde el último trabajo de Extraño Weys… ¿a qué se debe el regreso del grupo al panorama en esta época tan complicada para la sociedad en general, y la cultura en particular?
RODRIGO LAVIÑA: Antes de nada, muchas gracias por darnos un espacio aquí y por haber dedicado un rato a escuchar el disco. Efectivamente, 7 años son bastantes y más en este mundo hiperacelerado en el que vivimos. Pero la verdad es que nuestro proyecto está vinculado al amor que sentimos por esto más allá de las exigencias del mercado y el fast food generado para un público adiestrado a engullir acríticamente cualquier producto respaldado por el dinero. Volvemos porque tenemos ganas y porque lo necesitamos. Necesitamos darnos un espacio para hacer música juntos y necesitamos exorcizar nuestros demonios a través de la música.

ERDLC: Además en una época donde los medios digitales han acaparado el mercado discográfico, habéis apostado por publicar en formato físico, tanto en cd como vinilo…
RL: Estamos enganchados a esto y para nosotros el formato es muy importante. Nosotros llevamos muchos años acumulando plástico en casa, cosas que nunca hubiéramos encontrado si no estuvieran planchadas en vinilo. Me da igual, desde cuentos infantiles, cantos de pájaros o grupos de rumba que han poblado el ecosistema musical de este país haciéndolo diverso y rico. Planchar vinilo es asegurarnos que a pesar de los vaivenes de la industria, de aquí  a 40 años alguien encontrará una copia de nuestro trabajo en el Rastro de Madrid o els Encants de Barcelona, en una cubeta de 50 céntimos o una de 100 euros, pero ahí estará para quien lo quiera volver a escuchar. Será nuestra cápsula del tiempo.

ERDLC: Vuestro proyecto apuesta por la autogestión y surge de la intercooperación de diferentes cooperativas como La Ciutat Invisible, Quesoni, Say it loud, Versemblant, Krakatoa, Monostereo…
RL: Esto forma parte de nuestro espacio natural de funcionamiento y relación. Los dos, Patxi y yo, formamos parte de cooperativas de trabajo. Queríamos contar con estas herramientas y mantener la autogestión del proyecto desde formas de trabajo horizontales y de igual a igual. La idea es intentar hacer música sin dejarse a nadie atrás, sin precarizar a nadie por el camino y sentirnos todos parte de este viaje. No es nada nuevo, en el fondo, lo han hecho muchos grupos antes que nosotros, esto es sólo otro granito de arena más a esta forma de organizarse. Tiene la raíz en la vieja idea de que solos es más difícil y que con una cierta red es más fácil desarrollar un proyecto.

COMPARTIENDO AMOR

ERDLC: ¿Cómo definirías a grandes rasgos el nuevo disco “Rodrigo Laviña y su combo”, que se puede encontrar quién lo escuche?
RL: Es claramente un disco de rap, de eso no hay duda. Es nuestro background y nuestro lenguaje. Pero hay muchas maneras de relacionarse con esto y la nuestra creo que es, en cierta manera, bastante particular. Es un disco lleno de matices, fuera del resultadismo, con un sonido atemporal y con mucha música. Además, estamos la gente del colectivo rapeando y contando nuestras historias. Es algo sanador y un lugar donde expiar nuestras neuras.

ERDLC: ¿Qué queríais expresar con el imaginario gráfico y el diseño de la magnífica portada de Negrescolor, gran artista y socio fundador de La Ciutat Invisible?
RL: Queríamos contar con Negrescolor para hacer algo en el disco, era muy natural. Yo le he visto desarrollarse en el mundo de la ilustración desde que se lanzó a la piscina con esto y es un artistazo además de un buen compañero. Ha ganado premios internacionales y tiene un estilo muy particular. Lo que queríamos transmitir está en total relación con el disco, con esta manera no canónica de hacer las cosas. No es la portada que uno imaginaria para un proyecto de rap y a la vez, a mi juicio, incluye mogollón de referencias implícitas a las letras y los paisajes del trabajo así como de la cultura de la que venimos. Todo esto desde un prisma muy personal y único. Para mi es una maravilla poder contar con su arte.

ERDLC: Respecto a colaboraciones vocales, encontramos a Joana Gomila y Laia Vallès (Folk Souvenir, Paradís…), Martí Sales (Surfing Sirles) y Marta Garret (The Bop Collective)…
RL: Surgieron de manera muy orgánica. Son todas ellas personas con las que nos hemos cruzado en la vida más que en la música. Cada una en su campo, son gente a tener muy en cuenta, por lo que han hecho o por lo que tienen por delante. Joana y Laia (que es hermana de Patxi) tienen un grupazo que nos flipa, revisan la música tradicional de Mallorca con un filtro de otra galaxia. Sus trabajos han dejado a la gente volada. Martí es poeta, escritor y traductor, además tenía una de las bandas de rock más guapas de la última década en Catalunya. Nosotros somos fans de Surfing Sirles, reunían lo mejor del rock underground y una visión muy suya en las letras e interpretaciones, son una banda de culto aquí. Marta es una bestia en la voz. Canta en un octeto jazzístico con un presente muy prometedor y además ella trabaja con un montón de proyectos y grupos, ha sido genial contar con ella. Toda esta tropa está fuera del universo hip hop pero han decidido jugar con nosotros en este experimento, era también una apuesta artística. Se quedó alguna movida fuera, tal vez más adelante…

ERDLC: También contáis con el miembro satélite del colectivo Extraño Weys, El Gordo del Puru…
RL: El Gordo es un tipo muy suyo. Vive en el monte y nos conocemos desde hace un montón. Él nos metió de alguna manera en parte de este juego, ya tenía una mpc60 hace 20 años, tiene miles de discos y es un enfermo de la música, uno de los tíos que más locos por esto que conozco. Forma parte del colectivo pero no siempre es fácil trabajar con él, tiene su ritmo y su propia agenda vital. Por suerte pudo hacer el hosteo del disco, como hizo en el anterior trabajo, y se marca uno de los temas más guapos del disco. Es un hermano.

ERDLC: Creáis con vuestra música unas atmósferas muy especiales que van desde lo más jazzístico y soulero hasta la psicodelia de finales de los años 60, todo aderezado con samplers y con el bombo y caja del hip hop más contundente y clásico… ¿Qué sonido buscabais en este disco y como ha desarrollado Viktor Pizza las instrumentales?
RL: Toda la idea del concepto musical pasa por la cabeza, las manos y el cacharreo de Viktor Pizza, el alias de Patxi a los controles de los aparatos. La idea era mantener el vínculo con lo que nos ha traído hasta aquí, con el hip hop basado en sampleos, pero poder añadir nuestras influencias locales así como no estar encorsetados por la forma. Quiero decir que hay momentos muy distintos en el álbum, tempos muy diferentes y texturas variopintas. Aún así se percibe como una unidad sin sobresaltos. Lo que hemos hecho es lo que más se acerca a lo que imaginábamos. Viktor trabaja todo con hardware, desde sp303, mpc2000, ASR 10, sp1200… Esa es otra característica que le da un carácter que no siempre está presente en estos lares, aunque hay proyectos guapísimos aquí que también hacen esta apuesta estética.

REFERENTES DE LA ESCENA

ERDLC: Escuchando vuestra música se intuye que os gustan artistas como Madlib, MF Doom, J Dilla, Mos Def, Erykah Badu… en definitiva el sonido de Stones Throw Records… ¿Cuáles son vuestras influencias? ¿Qué artistas escuchan Extraño Ways y os han marcado?  
RL: Está claro que estos que nombras son algunos de nuestros referentes más importantes, seguro que se nota. También muchos de los grupos clásicos del estado, y en particular de Catalunya, nos han hecho ver la música como la vemos. Hablo de 7 Notas7 Colores, Solo Los Solo, Tremendo, Boo Dooh y muchos más. Ahora hay mil movidas que nos gustan de este y del otro lado del charco. Desde lo que han hecho Ebano&Luis Amoeba y más gente de Madrid, movidas canarias bestiales, el sur, gente de barna como Juli Giuliani, qué sé yo… es una locura. No solo en el micro, productores que flipas! Hay un montón de movidas más allá de las que copan los puestos más visibles. También el panorama en catalán está creciendo mucho y diversificándose, desde Poor Tramit, El noi de Tona, Lil Russia, Valtonyc a los clásicos Pawn Gang y un montón más de gente. Pero no sólo eso, yo soy un loco de la salsa, hago de DJ para bailadores, Patxi está hipermetido en el souleo y jazzeo, tanto local como internacional, y tenemos una sed enfermiza escuchando todo tipo de cosas. No escuchamos música para samplear, sampleamos música que escuchamos.

ERDLC: Rodrigo, eres todo un veterano de la escena con una dilatada y amplia trayectoria… ¿Qué ha significado para ti la grabación de este álbum a diferencia de tus trabajos anteriores en Pirat’s Sound Sistema y At Versaris?
RL: Bueno, que ésta vez sí que lo hacía sólo para mí. No hay concesiones de ningún tipo a nada ni nadie. No hay un estribillo para que cante tal o cual grupito. Ha sido una movida para nosotros. Encima nos entendemos mucho con Patxi, vemos y entendemos la movida igual. También ha habido un distanciamiento en las temáticas, aparentemente, que venían de la mano de proyectos anteriores. Esto es más personal y menos explícito. Para mi ha sido volver a conectarme con una movida que siempre ha estado ahí y necesitaba reconciliarme con ella.

ERDLC: En cuanto a la lírica, el idioma en el que alguien se expresa en el hip hop no es un elemento de discernimiento, de hecho enriquece la cultura, pero aun así hay que reconocer que abristeis puertas al acercar tanto el lenguaje del rap como del reggae al catalán… ¿qué piensas al respecto, percibes ese legado en el nuevo panorama musical?
RL: A nivel de Catalunya creo que sí, que todo aquello dejó un poso. En su día nos costó que cierta peña escuchara lo que hacíamos y de repente alguien te soltaba algo tipo “¡pues está to guapo esto que hacéis en catalán!”. Poco a poco hubo más aceptación de la gente del gremio y cada vez respetaban más nuestra propuesta. Siempre hubo la intención de hacerlo lo mejor que sabíamos y alguno de los trabajos que hicimos son ahora un “clásico” -las comillas con importantes- aquí. El tema da para hablar bastante, pero creo que los chavales ahora se lo toman de otra manera, la mezcla de idiomas en el parque supera el catalán-castellano, por suerte, y la riqueza y diversidad es mucho mayor. Que cada cual haga como sepa o le apetezca.

LETRAS DE COLOR

ERDLC: Tal y como vemos, tu trabajo se compone de una gran variedad de temáticas en las letras. ¿Quieres que llegue a la gente algún tipo de mensaje en concreto? ¿Qué quieres expresar como MC en este nuevo trabajo?
RL: Bueno, hay momentos de todo. Busco, sobretodo, equilibrar los fraseos y el contenido. Tan importante es lo que se dice como no cagar la música en el intento. Hay bastante de reparador e incluso, no me satisface este término, de terapéutico. A pesar del soliloquio que representa el disco hay un trasfondo de colectividad que acompaña la idea del conjunto del trabajo. Al fin y al cabo busco encontrarme, cicatrizar mis mierdas y compartirlas con la gente.

ERDLC: ¿Qué te motivó escribir la canción “Massa feina per un sol dia”?
RL: Es un beat muy laid back, muy tranquilo. El tema es como de vacileo pero viejuno. Más que un motivo hay una intención de reivindicarse, de expresar que seguimos aquí haciéndolo a nuestro rollo pasando de lo que esté pegando ahí fuera y que no te sacarás un beat así tan fácilmente aunque quieras… Quería decir algo así como “somos viejos pero chingones”.

ERDLC: Hay que disfrutar del viaje de la vida, de esos momentos mágicos… háblanos del tema “Arrait”…
RL: ¡Totalmente, sólo tenemos una! Es la movida más r&b del disco y nos apetecía poner algo más luminoso. Es una manera de decir que hay que poner de tu parte para que salgan las cosas e intentar no dejar mil cadáveres por el camino. Además, Marta, pilló el rollo perfectamente y se marcó uno de los pasajes que más me gustan del álbum. Lo hizo a distancia, desde Lisboa, y antes de pasarnos las pistas definitivas, sólo con lo primero que nos mandó, ¡ya era un temazo!

ERDLC: ¿Qué quieres expresar con el tema “Tot el que fem”?
RL: Bueno, es un tema que trata de quitar peso a lo que hacemos, y que no vale andar siempre diciendo que no a todo. No me refiero a la política, donde nos plantamos demasiado poco, si no a las movidas que suceden a tu alrededor. Que hay ganas de hacer lo que hacemos y que hay que hacerlo, no vale solo con imaginarlo. Además está Martí con su canturreo. Poder hacer este tema con él fue un viaje guapo.

ERDLC: En el temazo “Consens i crispetes”, uno de los más potentes del álbum, reclamáis respeto para los mayores, tanto a las personas con edad avanzada como a los artistas veteranos, los OG sin los cuales mucho de lo de ahora no existiría…
RL: Sí. Hay algo de eso. Que no me creo que estemos inventando la Coca-Cola a cada paso que da esta cultura. Pero también hay ganas de señalar que todo el mundo dice “soy la polla” y al final tampoco pasa nada si eres uno más. Que tampoco somos todos tan especiales y tan la hostia.

 

LA CULTURA, TOCADA PERO NO HUNDIDA

ERDLC: ¿Cómo ves el futuro en general con todo esto del Covid-19, y como os está afectando, hay previsión de conciertos?
RL: Nos afecta, sobre todo al día a día, como a todo hijo de vecina. Pero tenemos ya algunos bolos cerrados. El primero ya esta sin entradas, pero el 5 de junio tocamos en el Castell de Montjuïc y pronto saldrán los tikets a la venta. Hemos montado una banda de 6 musicazos y veremos si podemos moverla. Estamos pillando lo que espero que sea el final de la mierda que nos hemos comido todos el último año y tenemos muchas ganas de hacer cosas.

ERDLC: En esta época pandémica se ha podido constatar la importancia de la cultura en la salud de las personas y los beneficios sociales que aporta a la sociedad, ¿crees que saldrá la cultura más reforzada?
RL: Pues no lo sé. No soy especialmente optimista en esto. Espero que haya algo más de sensibilidad hacia el entorno y que la gente entienda que hay que suportear los proyectos que tienes alrededor. En otros lares lo tienen muy claro, support your local artists! No hay duda de que la “cultura” es necesaria para realizarnos como personas, pero aún queda campo que correr en lo material y lo ideal será apretar por ahí. Cuando las barrigas estén más llenas, el resto vendrá más fácilmente.

ERDLC: Muchas gracias Rodrigo, sigue en la lucha rompiendo estereotipos y continua siendo así de auténtico…
RL: Agradecerte el tiempo que dedicas a esto, Alberto, y que hagas un hueco para una propuesta como la nuestra. Mil gracias y animar a la gente a tomarse un rato y escuchar este disco del que hemos estado hablando. Salut i gràcies!

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